Hay que tener claro, en primer lugar los beneficios de mantener una ‘alimentación saludable’:
- Menor incidencia de problemas cardiovasculares.
- Menor prevalencia de diabetes mellitus.
- Reducción de la obesidad.
Nos vamos a quedar con diez condiciones básicas que debe tener una dieta saludable:Debemos eliminar o reducir al máximo cualquier alimento refinado. Eso incluye el azúcar blanco y sucedáneos o alternativas artificiales, la sal de mesa y las harinas que no sean integrales. El azúcar no es solo lo que se añade al café, sino también los alimentos que llevan (salsas, refrescos, dulces convencionales…) y los que se convierten en azúcar una vez en la sangre, como el alcohol y los carbohidratos rápidos refinados. El color blanco que no es propio de un alimento natural, es sinónimo de producto muy refinado, con pocas o ninguna vitaminas, minerales, fibra, enzimas, fitonutrientes o antioxidantes.
- Debemos eliminar o reducir al máximo cualquier alimento refinado. Eso incluye el azúcar blanco y sucedáneos o alternativas artificiales, la sal de mesa y las harinas que no sean integrales. El azúcar no es solo lo que se añade al café, sino también los alimentos que llevan (salsas, refrescos, dulces convencionales…) y los que se convierten en azúcar una vez en la sangre, como el alcohol y los carbohidratos rápidos refinados.
- Debemos eliminar los alimentos procesados que se compran en el supermercado convencional y reducir al máximo los alimentos envasados. Eso incluye los platos preparados listos para el microondas, las pizzas congeladas, los nuggets de pollo, los helados, las salsas con azúcares, colorantes, conservantes o grasas trans (hidrogenadas o parcialmente hidrogenadas), las bolsas de patatas, los sucedáneos de lácteos con azúcares o edulcorantes añadidos o desnatados, y los alimentos que intentan ser otro alimento a base de refinar y procesar alimentos naturales.
- Si compramos un alimento envasado debe contener el mínimo de ingredientes posibles, debemos poder entender y saber qué son, y ninguno debería ser azúcar. Si dudamos, mejor no consumirlo.
- Debemos comer más verduras, y muchas de hoja verde, que son las grandes olvidadas y las que más ayudan a prevenir y curar enfermedades, quemar grasas, eliminar toxinas y alcalinizar el organismo. Las frutas y verduras deben ser locales, de temporada, de proximidad y preferiblemente ecológicas.
- Debemos escuchar el cuerpo, respetar sus necesidades y el reloj biológico: comer cuando tengamos hambre y no hacerlo ni porque toca ni para saciar emociones, no cenar más tarde de las nueve, estar unas diez horas sin comer desde la cena hasta el desayuno, y seguir la regla del “menos es más”; es decir, mejor mezclar pocos alimentos en un mismo plato para digerir bien, que es la clave para tener una buena salud.
- Debemos priorizar la calidad siempre por encima de la cantidad; sobre todo cuando compramos alimentos de origen animal. Es mejor comer menos carne a la semana pero que sea ecológica; menos pescado, pero que no sea de piscifactoría alimentado con piensos convencionales; huevos y lácteos ecológicos antes que convencionales, porque el animal no ha sido hormonado ni medicado; legumbres cocidas en botes de cristal cocinadas con sal marina; aceites vegetales de primera presión en frío ecológicos y no refinados; frutos secos naturales en lugar de fritos y salados; agua de buena calidad… Y así con todos los alimentos.
- A lo largo del día o la semana debemos comer alimentos de
diferentes colores porque tienen antioxidantes diferentes que ayudan a
prevenir enfermedades.
- Debemos tener una actitud activa y proactiva ante la alimentación. Si os gustan mucho los dulces o algún tipo de alimento procesado poco saludable, hay que buscar una alternativa saludable para hacer en casa; hoy día hay recetas de todo en internet. Y si necesitáis comer entre horas o fuera de casa siempre es mejor llevar encima el mejor fast food que hay: fruta, frutos secos, semillas, verdura… ya sea al natural o en zumos o batidos verdes… Son alimentos muy al alcance que podemos encontrar fácilmente.
- Debemos masticarlo y comerlo todo con conciencia.
- En caso de patologías o desajustes de salud, no hay que automedicarse, ni con medicamentos convencionales ni con superalimentos (espirulina, maca…), sin la guía de un profesional de la salud de confianza.